Resulta realmente sorprendente lo pésimas que son las páginas web de las discográficas españolas. Hablo de las multinacionales. A nadie le cabe duda, hoy, que Internet es el carro al que, guste o no, hay que subirse. La gente contrata sus viajes, compra camisetas y realiza transferencias bancarias a través de Internet. Lo mínimo que podrían hacer las disqueras (como ahora se las llama, como si estuviésemos en Tijuana) es disponer de páginas web decentes. Vender, en sentido figurado, su producto en la Red, como lo hacen empresas de todo tipo. Colgar las últimas noticias de sus artistas; sesiones de fotos; vídeos de la presentación de tal o cual grupo en Nueva York, Londres o Madrid; vídeos de making of; calendario de lanzamientos... Es decir, lo básico.
En lugar de eso, en las web de las discográficas nacionales reina la racanería. A los periodistas nos sería muy útil, por ejemplo, encontrar un calendario de lanzamientos con cierta antelación. Lo más que encuentras, sin embargo, son los lanzamientos hasta la semana en curso. Si quieres saber los discos que publicarán el mes que viene, mejor busca en otra parte. O tal vez es que no lo saben ni quienes los publican. En cuanto a noticias, un ejemplo: en la web de EMI la noticia más reciente es de mayo de 2008 (lo cual invita a ser malévolo y deducir que, posiblemente, ninguno de sus artistas ha sido noticia desde entonces). Y si hablamos de fotos, vídeos o audios... el panorama es desolador.
Semejante desidia (o ceguera) es sintomática: en su crisis más aguda, no saben, o no quieren, o no les importa cómo acercar la música al consumidor.
Discográficas en la Red
Re-descubrimiento
Todo el mundo adora a los Killers. Incluso quienes no han oído una sola nota de su música. Queda bien decirlo en público: "Me gustan los Killers". A mí me gustan, aunque creo que en el último disco sólo hay una buena canción ('Human').
Sin embargo, he de agradecerles que me hayan servido para redescubrir a A-Ha. Los Killers me recuerdan mucho a A-Ha, y también a los Cars (y a muchos otros, a decir verdad). Esa épica electrónica, con algún que otro guitarrazo, era la seña de identidad de los noruegos A-Ha. Resulta paradójico: al contrario que los Killers, ellos siempre fueron clasficados como un grupo apestosamente comercial.
Soltar aquí una serie de alegatos a favor de A-Ha es absolutamente innecesario: quienes tenemos ya cierta edad y gozamos con las buenas canciones, sabemos lo buenos que eran. A mí me gustaron desde siempre. Su primer disco, Hunting high and low (1985), contenía joyitas como la maravillosa 'Take on me' (uno de los mejores vídeos de la historia; seguramente, el primer gran clip de animación), 'The sun always shine on TV' o la deliciosa balada que daba título al álbum (también con un precioso vídeo inspirado en el reino animal). Recuerdo que fui a verles en directo no hace mucho, hacia el año 2002, en La Riviera, y gocé lo que no está escrito.
Anoche estuve husmeando en el estante de la A de mi discoteca y me topé con cuatro discos relativamente recientes del trío: un directo (How can I sleep with your voice in my head', 2003), y tres discos de estudio, Memorial beach (1993), al que en su día ni si quiera me molesté en quitar el envoltorio; Minor earth major sky (2000), que incluía otro caramelito, 'Summer moved on'; y Lifelines (2002), con 'Forever not yours' o la propia 'Lifelines' como temas estrella.
Pienso darme un atracón de A-Ha en los próximos días. A la salud de los Killers.
Mierda y sabiduría
Tres comentarios rápidos sobre la situación actual de la Liga.
1. Si el Atleti es una mierda (que lo es), como he escuchado en más de una ocasión en los últimos meses, el Madrid, que está por debajo de nosotros en la tabla, ¿qué es en este instante?
2. Schuster vaticinó algo así: "Es imposible ganar en el Nou Camp. Podemos, si acaso, hacer un partido digno". El tío tenía razón. Acertó de pleno. Pero le echaron.
3. ¿Es así o sólo me lo parece? ¿No es cierto que el Madrid y sus medios secuaces han vendido la derrota como un triunfo? "Estamos en crisis y el Barcelona es una apisonadora, así que si no nos ha goleado, ¡es que no estamos tan mal!" Ay, qué lástima.