Eurocopa (II)

. 23/6/08

Dos cosas empañan el indiscutible éxito de España en la Eurocopa (porque pasar de cuartos ya es un éxito). Una, que atribuyan a Iker Casillas el mérito de la gesta. Los penalties los fallan los delanteros, no los paran los porteros; todo el mundo lo sabe. Y aunque el primer penalty lo detuvo con un paradón, no se puede negar, el segundo fue lanzado mediante la técnica del churro (la misma que empleó Dani Güiza en su turno). Lo otro es el cambio de Fernando Torres. Ninguna selección, con una tanda de penalties a la vista, retira del terreno a su jugador estrella. Es más, lo reserva para tan peliaguda tesitura. Me fastidió mucho. Si es por decisión táctica, un cero para Luis. Si se trata de una vendetta (nunca mejor dicho) por su rifirrafe anterior, aún peor. Pero, qué quieren, me alegro. Incluso me alegro por Luis. Y por José Armando Ufarte, siempre a su sombra, otro mito rojiblanco.


Ufarte, agachado, primero por la izquierda, al lado de Luis Aragonés.