Sólo en un medio como la televisión pueden darse esta clase de joyas. El zapping perezoso de última hora de la tarde me conduce hasta el programa Está pasando, de Tele 5. La imagen que encuentro ya es, por sí misma, impagable: Jaime Peñafiel, impecablemente vestido con traje y corbata, aparece sentado en butacón de mimbre junto a la duquesa de Alba, en otro butacón de mimbre, apostados ambos en lo que parece un frondoso jardín.
Es una entrevista. Peñafiel está entrevistando a la duquesa. Es, de hecho, un exclusivón: hablan del noviazgo (!) y la cancelada boda (!?) de la venerable e innacesible señora. La entrevista es extraordinaria, fluida, no decae. Jaime Peñafiel encuentra ese punto de periodista-confidente que desmorona a la entrevistada. Le coge de la mano. Ella, entregada (y por momentos emocionada), larga y larga y larga. Con pocas palabras, pero con grandes confesiones. Titulares a mansalva. "Nadie me ha querido como él", desliza la duquesa.
El tema, además, es una delicia. Pura poesía. Se habla de "locura de amor". ¿Es habitual que se hable de "locura de amor" en una entrevista, sea cual sea el medio? De fondo, pajarillos y música de guitarra. Desfilan los grandes temas de la humanidad: el amor, la felicidad, la envidia, la soledad, la muerte.
Para mayor gozo, la realización está curradísima. Cuento al menos tres cámaras. Dos con la duquesa y una con Peñafiel. La fotografía, la luz, la realización son exquisitas: parece una sesión del ¡Hola! Absolutamente formal e incluso rancia, si quieren, pero ajustada perfectamente al registro de la entrevista.
Si somos capaces de aparcar por un momento la merecida aversión hacia los programas y personajes del corazón (sí, es difícil), esto debería ser considerado uno de los hitos televisivos del año.
Disfruten pinchando aquí.
Momentazo televisivo
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5/9/08