Heavy metal con peluca

. 28/11/07

Ayer pasó a mejor vida Kevin DuBrow, un cantante de rock cuyo nombre probablemente no dirá nada excepto a los fans del heavy metal: era el cantante de Quiet Riot.

Quiet Riot nunca fue de mis grupos favoritos. Su contribución a la historia se limita a: 1) en algún punto de sus inicios su guitarrista fue Randy Rhoads (más tarde, mano derecha de Ozzy Osbourne... hasta que murió en un extraño accidente que implicó a una avioneta y su autobús de gira), y 2) su fidelísima versión del cervecero "C'mon feel the noize", de los reyes del glam Slade. En cualquier caso, todo aquel que quiera hacerse una buena recopilación de metal de los ochenta cometería un grave error si no contara con ese tema.

Yo recuerdo a Quiet Riot precisamente por Kevin DuBrow. O, mejor dicho, por su misterioso pelo. Me explico: cuando el grupo saltó a la popularidad, Kevin evidenciaba serios problemas capilares. Unas buenas entradas. Sin embargo, con el tiempo, la cabellera del simpático cantante fue ganando en espesura; primero con unos exuberantes rizos y, más tarde, con la banda ya en declive, con una estupenda melena rubia.

Dicho de otro modo: peluca. Sí, los grandes del metal de los ochenta llevaban peluca.

Kevin DuBrow, descanse en paz.


Kevin Dubrow, segundo por la derecha, en su apogeo musical (y declive capilar).

Kevin, años más tarde, con una frondosa melena rizada. Adiós a las entradas.

Kevin, muy bien acompañado y (tal vez por ello) con su fantástica peluca rubia.